Portimão es una ciudad portuaria ubicada en la región del Algarve, en el sur de Portugal.

Aquí tuvo lugar la novena prueba del Campeonato del Mundo de Superbikes del 7 al 9 de octubre y será también la última prueba de la temporada 2022 para el equipo Gil Motor Sport-Yamaha y su piloto Christophe Ponsson.

Recordar que Gil Motor Sport-Yamaha apuesta esta temporada por Dorna y Yamaha únicamente para las 9 pruebas europeas del Mundial de Superbike.

El recorrido del circuito portugués es uno de los más exigentes del Campeonato, ¡es imposible esperar un buen rendimiento si no estás físicamente al 100%!

El piloto de Gil Motor Sport-Yamaha lo hizo bien pero se le complicó este último fin de semana de carreras de la temporada.

No debemos fallar en la Superpole a riesgo de empezar muy lejos en la parrilla de salida y lamentablemente Christophe cometió un pequeño error que arruinó su sesión de clasificación, tendremos que trabajar duro para ganar posiciones en carrera.

Como resultado, nuestro piloto partió desde el puesto 25 en la primera carrera, que la dirección de carrera redujo a 14 vueltas en lugar de las 20 previstas inicialmente.

El piloto de Gil Motor Sport-Yamaha terminará esta primera carrera en la 22ª posición, mientras que en la segunda carrera, que transcurrió más de 20 vueltas, Christophe Ponsson gestionó muy bien su carrera, ya que no podía pretender estar en los puntos debido al circuito y Debido a su problema de salud, corrió toda la carrera detrás del ex piloto de MotoGP Tech3, el malasio Hafizh SYAHRIN, el campeón de Europa argentino FIM 1000 Superstock Leandro MERCADO y el campeón japonés de Superbike Kohta NOZANE, Yamaha oficial. Christophe Ponsson esperó sabiamente las 2 últimas vueltas para atacar a estos 3 competidores que le precedían, lo que le permitió adelantarlos uno por uno para tomar la bandera a cuadros en la 18ª posición.

El piloto del Gil Motor Sport-Yamaha no está en su lugar, pero con su lesión de Misano le resultaba complicado hacerlo mejor. Lo positivo del fin de semana portugués es que el piloto Christophe Ponsson consigue luchar y dejar atrás a competidores experimentados y validados, lo que es señal de una buena voz curativa.